economía circular

Ejemplos de economía circular, vinted y primavera en la India

He publicado el episodio 4 de mi podcast Esto se va la mierda”, el podcast dedicado a hablar sobre el futuro de los terrícolas. Quería comentarte que llevo unos días en los que esta ciudad catalana en la que vivo parece un horno. Que sí, que ya sé que el calor y las mangas cortas molan. Hay que ver lo rápido que te vistes por la mañana cuando hace calor: saltas de tu cama, te colocas un vestido y ¡hala!, lista para comerte el mundo. Y las terrazas, ¿te has fijado cómo están las terrazas de los bares? Atiborradas de seres humanos haciendo la fotosíntesis asidos a su cerveza. Sí, el calor tiene su gracia, pero todavía no toca estar a 30 grados.

La ola de calor en la India

El otro día hablaba con un amigo que tiene que viajar a la India y me decía que estaba a 40 grados, algo muy atípico en esta época del año. Además, India es una gran exportadora de trigo (abastece a gran parte del continente africano). El trigo es un cereal muy sensible al calor, sobre todo en la fase final en la que maduran los granos. Por eso, los agricultores de trigo ya programan realizar la siembra de modo que la maduración coincida con la primavera que, por lo general, es más fresca. Sin embargo, el cambio climático está acentuando las olas de calor en la India y su frecuencia. Antaño esto ocurría una vez cada 50 años, pero ahora hay olas de calor uno de cada cuatro años. Algo bastante preocupante y que solo puede acrecentar mis ganas de grabar este podcast.

¿Qué es la economía circular?

Hoy no te hablaré más de trigo, pero sí de economía circular versus economía lineal. En 2020 la Unión Europea aprobó el llamado Plan de Acción para la Economía Circular, un paso más para alcanzar la neutralidad climática en el 2050. El plan de acción tiene como misión la de pasar de un modelo de economía lineal (que es el modelo imperante y depredador de tomar los recursos que encontramos en la naturaleza, transformarlos en bienes de consumo y luego generar residuos que no se utilizan) a un modelo de economía circular.

Imagínate que una empresa, una de estas grandes multinacionales que producen electrodomésticos, quiere lanzar al mercado una nueva nevera. En un modelo de economía circular, el equipo de ingeniería tendría que diseñar la nevera, no solo pensando en que sea ecológica y que consuma el mínimo de energía posible (que también es necesario), sino pensando en todas y cada una de las piezas que van a formar parte de la nevera y en tener claro qué función tendrá cada una de estas partes cuando deje de funcionar la nevera. Estas piezas tendrán que poder entrar de nuevo en el ciclo económico. Por ejemplo, reusarlas para fabricar una nueva nevera u otro tipo de electrodoméstico.

En un modelo de economía circular, las empresas deberían cambiar el foco hacia la sostenibilidad en lugar de la rentabilidad, como están acostumbradas. Podría parecer difícil convencerlas, ¿no crees? Sin embargo, la economía circular también tiene ventajas para las empresas, porque reducen sus costes de producción al necesitar menos materias primas. Imagina que esa nevera deja de funcionar, pero la misma empresa puede reutilizar algunas de sus partes y fabricar otros artículos.

En definitiva, es un cambio total de paradigma y una ruptura con los preceptos de la economía lineal que consiste en saquear a la naturaleza, producir, comprar, usar y tirar y volver a producir, obviando la huella ambiental y siempre en pro del beneficio económico. En este sentido, se trata de priorizar los servicios frente a la producción de bienes. También de reducir el consumo. Básicamente, todo se resume en la famosa regla de las “3 ERRES“: Reducir, reutilizar y reciclar.

Te pongo varios ejemplos de cómo funcionaría este sistema económico

Para empezar, tendría que reducirse el consumo y, por ende, la producción. Si tienes que comprar algo ¿es porque lo necesitas realmente?

El el segundo pilar de la economía circular es reutilizar. A mí últimamente me ha dado por Vinted, una aplicación en la que compro ropa de segunda mano. A veces la encuentro incluso con etiqueta o prácticamente nueva. Es súper útil para mí, pero para la mis hijos lo es aún más, porque compro ropa infantil a buen precio y que solo van a llevar una temporada. También suelo comprar artículos por Wallapop. Esta aplicación me encanta, porque además los puedo localizar cerca de mi casa.

Volviendo al ejemplo de las neveras, otra forma de reutilizar es dándole una segunda vida a algunas piezas del producto original para crear otros productos nuevos. Podemos reutilizar muebles viejos y restaurarlos, arreglar electrodomésticos que no funcionan, o crear objetos nuevos a partir otras piezas. Por ejemplo, aquí en Terrassa hay una chica que reutiliza viejos paraguas para hacer compresas reutilizables. Hay empresas que utilizan plásticos para hacer bolsos, y otras que hacen calzado a partir de viejos neumáticos.

La idea es reducir el volumen de residuos a su mínima expresión.

El último paso sería el reciclaje cuando ya no se consiga realizar nada más para aprovechar las piezas de desecho. En este punto, y para cerrar el círculo económico —de ahí el nombre “economía circular”—, los residuos no deberían acabar en una montaña de basura, sino incorporados de nuevo al proceso de producción para actuar, por ejemplo, como combustibles. De este modo, el sistema se retroalimente, porque los recursos se pueden convertir en productos, los productos se transforman en residuos y los residuos otra vez en nuevos recursos.

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