Mujeres emprendedoras. Formas de emprender en cosmética natural. EPISODIO 20 DEL PODCAST.

He dedicado el episodio 20 del podcast a hablar sobre formas de crear negocios en cosmética natural para mujeres emprendedoras. Lo cierto es que la cosmética natural, como forma de negocio, puede adquirir muchos formatos. En el capítulo 15 del podcast realicé una entrevista a Sara Sierra, una doctora en químicas que nos explicaba su experiencia como profesora de cosmética natural. Que, por cierto, mejorando lo presente, yo misma también imparto varias formaciones online y presenciales en cosmética natural que podrían interesarte.

Es posible que te encuentres en alguna de estas situaciones: puede que lleves un tiempo elaborando tu propia cosmética natural. Por el contrario, puede que no sepas prepararla, y sin embargo hayas abandonado el lado oscuro de la fuerza y solo consumas cosmética natural. En cualquiera de los dos casos, seguro que estás maravillada con el cambio sobre tu piel y puede que te estés preguntando:

¿Y si me dedicara a esto?

Traigo buenas noticias. El consumo de productos naturales y ecológicos tiene una tendencia al alza que no sólo se ha limitado a la alimentación, sino que se ha extendido a los productos cosméticos. El deseo y la voluntad de querer mantener un estilo de vida más natural y saludable se está reflejando en las pautas de consumo lo cual favorece bastante a las que queremos vivir del potingue. Además, este interés no solamente se centra en los beneficios sobre nuestra salud.

Cada vez son más las personas que requieren que sus cosméticos no hayan sido testados en animales, aunque, ojo, que en Europa ya sabemos que eso fue prohibido hace un tiempo, pero no acaba de estar claro el asunto respecto a la trazabilidad de las materias primas que se han empleado para preparar el cosmético. Sin ir más lejos, el otro día comentaba en Instagram la cantidad de cosméticos que tienen la certificación vegana porque no contienen productos de origen animal en su composición.

Sin embargo, ¿Podemos considerar vegano a un producto que contiene aceite de palma cuya producción ha supuesto la devastación de campos que han hecho desaparecer (matado) a un montón de especies autóctonas como los orangutanes? Difícil de controlar, aunque afortunadamente cada vez somos más las desconfiadas y cada vez el patrón de consumidor es más exigente y meticuloso a la hora de escoger y eso es muy, pero que muy bueno.

Por estas y muchas otras razones, la demanda de cosméticos naturales, éticos, veganos, ecológicos, artesanales, es cada vez más grande. He leído que podría alcanzar un valor de 48.000 millones de dólares en el 2025, según publica un informe en el Grand View Research, que es una consultora que realiza estudios de mercado a nivel mundial. 

Te digo todo esto para decirte que es un buen momento para emprender un negocio en cosmética natural. Pero, ¿Qué negocio? ¿Sacar al mercado una nueva línea de productos muy especializada en un sector? ¿Dar formación? ¿De qué tipo: online o presencial? Te voy a hablar de algunas formas que puedes tomar como emprendedora. No son excluyentes entre sí. Puedes realizar una o varias. Puedes tener conocimientos previos en cosmética natural (saber de formulación) o no necesariamente. Puedes dedicarte a tiempo completo o a tiempo parcial. Ahí te dejo algunas ideas.

TALLERISTA:

Podrías dedicarte a impartir talleres presenciales u online. Lo más sencillo es impartir talleres presenciales, sin embargo, las restricciones por el COVID-19 podrían llegar a limitarte, así que lo mejor es considerar la posibilidad de realizar cursos online. Así he estado yo durante mucho tiempo. Y aún en estos momentos, me gusta combinar las formaciones presenciales con los talleres online.

MONTA TU ACADEMIA:

Si lo de los talleres no es lo tuyo porque te gusta más el back office y trabajar detrás de las bambalinas, puedes montarte una academia. Te hablo principalmente de una academia online, a no ser que dispongas de mucho dinero para montarte una de ladrillo. En tu academia podrás subir tus cursos de cosmética y divulgar toda tu sabiduría-

Hasta ahora, yo he combinado el trabajo de tallerista con la venta de mis infoproductos: mis ebooks sobre cosmética natural y mi curso online “Alimenta tus rizos”.

Los infoproductos son, en mi opinión, una buena inversión de tiempo. Piensa que, una vez están acabados y colgados en tu web, lo único que tienes que hacer es hablar de ellos y esperar. Es interesante crearte un blog paralelo y mantenerlo activo para que Google te visibilice. También puedes invertir en publicidad para que las personas que busquen contenido relacionado se topen con tu web y compren tus cursos.

CREA TU LÍNEA DE PRODUCTOS:

Si eres hábil con las fórmulas, seguro que tienes alguna en el cajón de la que te sientes especialmente orgullosa. ¿Y si creas una línea de productos? Cuidado con esto, porque no es tan sencillo como parece, al menos en Europa. Cada producto cosmético nuevo, y aquí incluyo cremas, desodorantes, maquillaje, dentífricos, incluso perfumes, tiene que ser registrado cumpliendo con el Reglamento (CE) no 1223/2009 del Consejo y Parlamento Europeo y con las consecuentes legislaciones de cada estado miembro. El objetivo de este reglamento es que el cosmético se someta a las pruebas pertinentes que corroboren que es seguro para la salud humana. También se tiene que registrar en el portal de productos cosméticos de la Comisión Europea (Cosmetic Products Notification Portal o CPNP.) La función de este registro es tener controlados, a través de una ventanilla única, todos los productos cosméticos que se ponen a la venta en Europa, sobre todo para poder tratar posibles intoxicaciones y facilitar la tarea a los centros de toxicología. 

En España, el organismo competente es la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, que depende del Ministerio de Sanidad.

En resumen, si quieres preparar y vender tus propios productos, necesitas cumplir con el reglamento, declararte como persona responsable (tú u otra persona)y tener un lugar de trabajo que debe habilitar el organismo competente.

Si no vives en la Unión Europea, deberás consultar los requisitos legales que existen en tu país. Recuerda que un producto cosmético se aplica sobre la piel o las mucosas (como los dentífricos) y esto no es moco de pavo (valga la redundancia). La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo y tenemos que preservar la salud de nuestros potenciales consumidores.

Si todo lo que te acabo de contar te resulta demasiado burrocrático, debes saber que existen empresas que ofrecen servicios integrales de formulación, pruebas, legalización, registro y fabricación. Es una opción si no te apetece montar un laboratorio en tu habitación de invitados. Eso sí, no siempre es la opción más económica a medio o largo plazo. ¡Ah! Y que sepas que también existe la opción de alquilar laboratorios por horas.

VENDE PRODUCTOS QUE OTROS HAN FABRICADO:

Puedes hacerte afiliada de algunas marcas y vender los productos que más te gusten, bien online o montar una tienda.

COSMETÓLOGA:

A lo mejor te suena a chino esta palabra, pero cada vez son más las personas que apuestan por un trato muy personalizado en lo que respecta al cuidado de su piel más allá del dermatólogo, que estaría más orientado a asistir patologías de la piel. Una cosmetóloga trata pieles sanas que quieren mejorar algunos aspectos y dar con el cosmético ideal para cada caso, así como sacar el máximo partido de nuestro querido cutis. Por cierto, este es un servicio que yo misma puedo ofrecerte si lo necesitas.

ESCRIBE:

Si lo tuyo es crear contenido, dedícate a escribir y a divulgar tus conocimientos. Quizás alguna revista necesite de tu sabiduría para incluir alguna columna o artículo de cosmética natural. Y si tu amor por la pluma va más allá, escribe un libro. Hoy en día existen mil formas de publicarlo.

DIVULGA, HAZTE ORADORA:

Si te gusta la comunicación tanto como la cosmética natural, podrías dedicarte a hacer charlas informativas sobre los beneficios de la cosmética natural para nuestros cuerpos y nuestro planeta. Seguramente hay muchos centros y asociaciones que están deseosos de pagarte para escuchar lo que tienes que contarles.

En fin, no sé si te he convencido con estas ideas. Seguro que hay muchas más formas de hacer de la cosmética natural una forma de vida. En esas estoy yo ahora mismo y créeme que, aunque hay momentos en los que, como en otras circunstancias, hubiera tirado la toalla, todo lo que hago me parece muy gratificante y un estilo de vida cargado de buenos propósitos: el de cuidarnos a nosotras y a nuestro entorno con consciencia.

Espero que esta información te haya resultado útil. Como siempre te pido, no dudes en compartirla con quien pudiera interesar y seguirme en las redes si te apetece.

¡Salud y potingues!

3 Comments
  • Pingback:Trabajar en una cooperativa de artesanas
    Posted at 12:47h, 03 marzo Responder

    […] intensiva, a la hora de decidir incorporarse al mundo laboral, buscó una salida a través de la auto ocupación para poder seguir cuidando de ellos. Entonces tuvo una idea, y necesitaba contar con obrador para […]

  • Pingback:Tipos de cosméticos
    Posted at 15:40h, 07 marzo Responder

    […] más cambios en mi vida. Cambio de vivienda, de objetivos profesionales y vitales, porque para mí la profesión está cada vez más íntimamente ligada a mi propósito vital. La palabra propósito ha tomado mucha importancia. Ha sido un concepto que ha revolucionado mi […]

  • Pingback:Cuidado de la piel del bebé. Episodio 28 del podcast - Cosmética de trincheras
    Posted at 09:57h, 12 mayo Responder

    […] para elaborar cosméticos es el mismo para niños que en adultos, es decir, ambos se basan en el Reglamento europeo RE 1223/2009. Sin embargo, existe una guía no vinculante redactada por el Comité de Expertos en Productos […]

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