Escuela de viejas

 

¿Te dicen de usted aunque te acabes de embutir en los pantalones de tu hija adolescente? ¿La gente ya no sabe qué edad echarte porque estás en esa llanura que va desde los 40 a los 60? ¿Has hecho más deporte en el último año que en toda tu vida? ¿Sigues sin aclararte con esa dichosa app y necesitas la ayuda de un millenial?

 

 

Felicidades, ya eres una señora

 

¿Por qué queremos evitar a toda costa que nos cedan el asiento en el autobús o que nos digan de usted?

 

Sencillo, porque los imperativos sociales proclaman la eterna juventud a diestro y siniestro, como si cumplir años o parecer mayor fuera de perdedores. 

 

En el caso de las mujeres, las exigencias “antiaging” son todavía más pronunciadas. A diferencia de los hombres, las canas no nos hacen “maduritas interesantes”, sino que a veces connotan dejadez y falta de autocuidado. No hay demasiada representación de mujeres pasados los 40 en publicidad, y entramos en una especie de línea continua de nuestras biografías en las que se nos invisibiliza. 

«Una vez alguien se refirió a mí como esa vieja. No puedo describir el conjunto de sensaciones que me invadieron en aquel momento. No, no quería ser una vieja. Ni una señora. No quería que nadie me empujase al pozo del olvido. Quería seguir existiendo, seguir aportando sin que mis años restaran. En el trabajo, mis opiniones parecían menos interesantes que antaño. Las nuevas generaciones manejaban mejor la tecnología, podían tener ideas más frescas que yo y eran más creativos. Al menos, eso es lo que se me hizo creer. De repente, era como si todo lo que hubiese tenido que aportar al mundo ya lo hubiese hecho. A veces me he sentido como un mueble, un lastre. Entonces empecé a escuchar todos esos conceptos de antiaging y antiarrugas, que nos hacen repudiar la vejez y pensé que tenía que acabar con la tiranía de la juventud eterna». E.V. 

La Escuela de Viejas: un espacio para el empoderamiento y la rebeldía


Cosmética natural

 

Encuentros mensuales para aprender a elaborar cosmética natural. En ellos, reproduciremos en directo recetas prácticas y efectivas para cuidar de nuestra piel y de nuestro cabello. Te enviaré previamente la lista de la compra para que elaboremos juntas la preparación si así lo deseas. Si no puedes conectarte, podrás ver las clases en diferido todas las veces que quieras, pues quedarán grabadas.

 

 

Algunas de las recetas que encontrarás y que están programadas para el primer semestre de la escuela son:

*Serum proedad con ácido hialurónico.

*Crema de manos despigmentante.

*Contorno de ojos.

*Champú sólido para el cabello, con o sin canas.

*Crema hidratante con liposomas.

*Lubricante natural.

 

 

Masterclasses con diferentes especialistas

 

Una vez al mes contaremos en la escuela con una invitada de lujo especialista en una disciplina relacionada con en envejecimiento que nos ayudará a empoderarnos con herramientas prácticas y creativas:

 

Algunas de las temáticas que vamos a tratar durante los primeros 6 meses serán: 

 

*Menopausia y climaterio.

* Yoga facial.

* Escritura creativa.

* Edadismo.

* Masaje facial con gua sha.

*Plantas ayurvédicas para el cuidado capilar.

¿Cómo es estar en la Escuela de Viejas?

La inscripción a la escuela se realiza a través de Patreon. No requiere el pago de matrícula y puedes darte de baja cuando te de la real gana.

 

Cada mes podrás asistir a las dos clases en directo que realizaremos vía zoom (una conmigo y otra con nuestra invitada especial) y formular las preguntas que desees. 

 

Las clases tendrán lugar, por lo general, los domingos por la tarde y durarán una hora aproximadamente. 

 

Ser miembro de la escuela te da derecho a acceder a la biblioteca de recursos y a todas las clases que quedarán grabadas para revisarlas siempre que quieras.

 

En estos momentos, las inscripciones para nuevas alumnas están cerradas. Si quieres ser la primera en enterarse cuando vuelva a abrir nuevas plazas, apúntate a la lista de espera y te avisaré.

15 EUR / mes (+iva)